Cuando duerme
abraza las sábanas como si fueran tierra.
A la ventisca suplica, a los albinos copos,
tapadme, tapadme, bonitos.
Con una capa de hielo, queridos míos.
Sus bucles raíces sobre la almohada
en silenciosas lagunas
en silenciosas lagunas
bucea con topos negros.
Juegan a hacer el muerto
vueltos hacia el techo
la tripita y los ojos ciegos.
Me mintió. Si las palabras cambian, dijo,
el sentimiento permanece, inalterable.
Era incierto. Nada sobrevive, al cabo.
Vestida me arrojo a la marea,
mis cabellos con limo perfumados.
Quizás hoy jamás llueva.
¿Quién es Nausicaa? Yo conocí a una chica que se llamaba así...
ResponderEliminarPor cierto, conseguí Origen pirateado, si quieres te la dejo!
Pues érase que se era una princesa feacia (de eso no me acordaba, lo he mirado), que encontró a Ulises en la playa tras un naufragio, lo llevó a la corte de su padre, y se enamoró de él -de Ulises, no de su padre-. Pero el muy ingrato prefirió seguir su camino y retornar a Penélope. Ahora que lo pienso, tiene un aire a La Sirenita de Andersen.
ResponderEliminarPues claro que me apetece lo de "Origen", aunque no sé si mis cacharros digitales me permitirán verlo... Si quieres, en intercambio, te paso la serie completa de "The Wire", me la grabó un amigo pero la mencionada chatarra sólo me ha permitido ver la segunda temporada (en dvds originales), y escuchar el sonido de las otras.
A ver si tú tienes más suerte.